La actriz de 18 años, quien prepara un nuevo show de televisión, sería la nueva gran estrella de Disney.
El trono del imperio de Disney estaba vacío; las antiguas soberanas del reino de la fantasía se encuentran fuera de juego. Hillary Duff está embarazada, Selena Gómez tiene la fiebre Justin Bieber, Miley Cyrus se pasea oronda con nuevo novio y múltiples tatuajes en el cuerpo y Demi Lovato acaba de salir de rehabilitación. Era hora de buscar sangre fresca. Hoy los reflectores enfocan a la candorosa Debby Ryan de 18 años. Sin embargo, ella no es como las demás.
Ryan comenzó sus avatares televisivos al igual que Selena Gómez, en “Barney y sus amigos”. Tenía 13 años. En 2008 la joven y atractiva actriz pasó a formar parte del elenco de “Zack y Cody, gemelos a bordo”, programa que hasta hoy se emite y en el que consiguió la fama en el público infantil de todo el planeta.
Tras protagonizar algunas películas de Disney, Debby por fin consiguió su sueño dorado: su propio programa de televisión; “Jessie”, el cual actualmente está grabando, se emitirá a partir del 21 de octubre en Estados Unidos.
UNA HISTORIA MÁS REAL
Sin embargo, “Jessie” es una propuesta bastante más madura que las series a las que Disney nos tiene acostumbrados. El programa retrata la vida de una joven de 18 años que se siente como pez fuera del agua tras mudarse de Texas a Nueva York para trabajar como nana.
Sin embargo, aunque la industria la vocea como la nueva soberana del mundo de Mickey Mouse, Debby afirma que ello la tiene sin cuidado. “Creo que la gente empieza a tener problemas cuando piensan que son estrellas. La manera más fácil de no creerlo es evitando saber lo que dice la gente sobre uno”, explicó en declaraciones al diario “The Huffington Post”.
A diferencia de muchas estrellitas, Ryan, quien también se encuentra escribiendo las canciones de su nuevo disco, parece tener los sobre la tierra.
Esperemos que no sucumba ante lo que algunos han llamado “la maldición de Disney”, cruda senda en la que las niñas ingenuas (como Britney Spears y Lindsay Lohan) se convierten en desenfrenadas bombas de tiempo.
Fuente: El Comercio
