Gisela, en tu libro ‘El éxito está en tus manos’, en uno de los capítulos dices que ‘tu vida está completa y no necesitas de un amor’.
Es la verdad, mi vida está completa desde hace siete años. Ahora me conozco y soy feliz. Estar en pareja es precioso, es lo que debe suceder. Pero estar sola en este tiempo, para mí ha sido una panacea. No estoy dispuesta a mirar a un hombre y pensar que me va a dar la felicidad porque la felicidad ya la tengo.
¿Y cómo haces con ese lado vacío de la cama cuando duermes?
(ríe) Para empezar, no está vacío. Está lleno de almohadas con las que me voy acomodando en la noche.
¿Cambiaste de cama?
Ja, ja, ja. La verdad que esta cama solo la he usado yo. Es una cama grande y linda. Hace muchos años dejé todas mis cosas, las rompí, las regalé y empecé mi nueva vida. No hay nada de otras personas, solo mías y las de mi madre con quien vivo.
¿Cómo debe ser ese hombre que llegue a tu vida?
Ya no podría estar con un hombre que fume y con alguien que no crea en Dios y no reconozca a Jesús, como hijo de Dios, porque sería como salir con un chino, porque tendríamos códigos distintos.
¿Y no hay nadie que te pretenda?
Algunos, pero estoy tranquila.
¿Alguno tiene detalles contigo?
Sí, debo reconocer que hace poco me fueron a recoger al aeropuerto con un regalo y fue un lindo detalle, pero no podría engañar a alguien solo por tener compañía si no siento amor.
¿El amor viene con el sexo?
Viene con todo, es el gusto.
Pero muchos se preguntan, ¿cómo haces?
(abre sus ojos y sonríe) Es que no lo hago y la paso bien. Además, el sexo -para mí- sin amor, no me prende, y eso me ha pasado desde siempre. Cuando me he enamorado mi piel se ha abierto totalmente. El sexo con amor es el paraíso y a mí me gusta tocar el paraíso.
¿Eres celosa?
No, nunca. ¿Por qué crees que me han pasado tantas cosas? Me la han hecho y cuando eso ha pasado, dije: Te vas y a mí no me vuelves a ver… y seré amiga de mis ex después de 15 años.
Pero has dicho que te llevas bien con tus ex.
Sí, en mis recuerdos (ríe), pero no me siento con ellos a decir qué lindo lo que pasó.
Sin embargo, con Roberto la situación es distinta.
Con Roberto me divierto mucho y a Javier le tengo cariño.
¿Es cierto que hubo un acercamiento telefónico con Javier Carmona?
No, nunca se ha dado. Y con Roberto fue por lo del programa. Cuando he dicho chau, a veces ha sido con maletas. Otras, con bolsas.
¿A Carlos Vidal lo despachaste con bolsas?
¡No! Porque nunca viví con él, solo fue un enamoradito, pero con mis esposos sí. Si lo que hizo fue fuerte, se fue con las bolsas. No le iba a dar una maleta, porque si eres tan rápido en sacar la vuelta, pues echa en una bolsa los polos y jeans, y ¡chau! Ya después, uno de ellos me dijo: Cómo me hiciste eso.
Fue con Roberto, pobrecito.
Sí, pero después agarró unas maletas, pero Robert nunca ha sido pobrecito, siempre salió con el carro último modelo…
Ahora que tu vida espiritual está más tranquila, ¿te reunirías con Tula?
Con todos los que menciones, con mi papá, abuelo. Si mañana me muero, mi familia sabe que me voy sin cuentas por pagar ni odios ni rencores. Uno tiene que aprender a superar todo en la vida y eso es lo que plasmo en mi libro ‘El éxito está en tus manos’, y por eso lo comparto con todas las personas que me han apoyado a lo largo de mi carrera. Sin embargo, para estar en paz, hay que empezar por reconciliarse con Dios y uno mismo. Ahora voy a dar conferencias por el libro y estoy ilusionada, porque deseo que la gente sepa que se puede estar desanimado, triste, pero es solo un instante, porque la vida es un constante correr para alcanzar tus metas.
CAMBIOS
Acabas de realizar cambios en tu programa, ¿es por la competencia que se avecina?
Quizá si el escándalo o presentar notas que salen en todos los diarios, canales o gente mediática me hubiera funcionando, por supuesto que lo hubiese hecho, pero la vida no me permite eso y mi público en el acto me lo hace saber.
Y también las críticas de Magaly, que te mandó a leer tu ‘Coquito’ y Beto, que hasta te llama la ‘nueva catedral de Lima’, casi te beatifica.
Son estrategias de Magaly y de Beto, y de cualquiera que vaya a competir conmigo. Las bromas con respeto las acepto, lo que no permito es que se me difame porque para eso hay una vía legal que adoptaría, aunque te digo que después de 26 años en la televisión, ya estoy curada.
¿Te preocupa la competencia que se avecina los sábados?
Ya bastante tienen ellos estresándose, para qué voy hacerlo yo. Nosotros estamos tranquilos y solo queremos divertir a la gente que nos ve, porque el insulto, la agresión, no es mi fórmula. Es la de otros.
¿Continúan tus aspiraciones políticas?
No, desistí. Justo ahora me vinieron a proponerme una alcaldía, pero lo mío es otro camino. Lo mío es la televisión y ten por seguro que cuando se apaguen las luces, en algún momento, me iré tranquila.
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Fuente: Diario Trome
